Cuando llegamos a una edad avanzada y necesitamos de cuidados especiales lo que menos esperamos es que los profesionales que deben ayudarnos a llevar mejor esos días de nuestras vidas no sean expertos en geriatría, médicos y enfermeras cualificadas. Incluso un monitor de ocio que nos alegre los días con diferentes actividades dentro de un centro asistencial debe ser alguien que tenga experiencia y sea un auténtico profesional en su sector.
Hoy vamos a presentaros el Centro Asistencial Benviure, una residencia geriátrica de Barcelona cuya web es residenciaancianosbarcelona.net y se ha convertido en todo un referente a nivel nacional. Tanto familiares como residentes de Benviure hablan maravillas de las instalaciones y del personal, así como también destacan sus múltiples servicios, todos pensados para conseguir una gran calidad de vida y el bienestar de sus internos.
Benviure no es una residencia de ancianos común porque no sólo se centran en las necesidades básicas de los ancianos, algo que por descontado tienen más que cubierto, sino que también son conscientes de que las personas mayores que viven con ellos necesitan ocio, necesitan actividades, cariño y diversión. Es por este motivo por el que destaca también Benviure y por el que hemos decidido hablar de ellos.
Obviamente, la mala imagen que algunos centros y residencias de ancianos, más conocidos como geriátricos, han dado a este sector provoca que muchos familiares tengan cierto recelo o reparo a la hora de dejar a sus mayores en manos de personas que no conocen y en quienes aún no han depositado su confianza. Pero la experiencia y los años de arduo trabajo de Benviure avalan a toso su equipo de trabajo y demuestran que hablamos de auténticos profesionales que saben qué es lo que necesitan los ancianos que conviven con ellos.
Ocio y Diversión
Nosotros no podemos estar más de acuerdo con Benviure en este sentido, al igual que con El País, que apuesta por la integración de la tercera edad en la ciudad. Como bien dice este artículo del diario nacional, en España somos cada vez más longevos, lo cual es un logro y motivo de alegría, sobre todo si llegamos hasta avanzadas edades en plena forma ¿verdad? Y por eso precisamente es por lo que la ciudadanía debe pensar en los ancianos como un sector más de población e incluirlos en las actividades de localidades, barrios y ciudades.
El problema es que como los nacimientos son cada vez menos y más tardíos los estudios demográficos alertan del progresivo envejecimiento en las grandes ciudades. Pero ese es otro tema en el que no vamos a entrar.
La realidad es que el ciudadano jubilado, que supera los 65 años de edad es, actualmente, un ciudadano en plenas capacidades y puede ser un activo realmente importante y valeroso para nuestra sociedad, por eso hemos de promover su inclusión en la mayoría de actos, eventos y en cualquier tipo de ocio y esto se debe incluir también en las residencias de ancianos, tal y como ya hace Benviure.