En algún momento de nuestra vida, se hace indispensable que empecemos a pensar en una cuestión como lo es la de independizarnos. Suele decirse que en España tardamos más que en ningún otro país de la Unión Europea en salir de casa de nuestros padres, pero lo cierto es que, antes o después, lo terminamos haciendo. Es algo natural y que, a medida que avanzan los años, es necesario tanto para que nosotros hagamos nuestra vida como para que nuestros antecesores descansen algo mejor. Es lo que llamamos en ocasiones ley de vida.