La publicidad ha pasado de ser un elemento opcional para las empresas a convertirse en un elemento necesario, casi obligatorio, y diferenciador para poder competir en el mercado y perdurar en el mundo de los negocios.
A través de una buena campaña de publicidad generamos una buena imagen de marca, lo que se traduce en un mejor posicionamiento en el mercado, mejor competición con otras marcas y mejores resultados económicos.
El objetivo de toda buena campaña de publicidad es atraer al cliente, para lo que debemos emplear textos, fotografías y texturas, entre otros elementos, que sean atrayentes para nuestro público objetivo.
El mensaje que queramos transmitir con nuestra marca debe ser claro, destacando aquellos aspectos de nuestra empresa o de nuestros productos o servicios que nos hacen distintos a los demás.
En otras palabras, la publicidad busca informar, seducir y recordar. Invertir en publicidad es construir imagen.
¿Qué tipo de publicidad debo hacer?
Tan importante como saber donde publicitarnos mejor, es también que tipo de publicidad hablará mejor de nosotros; por lo que nuestros amigos expertos en publicidad impresa y digital de Publigar nos explican todo lo que debemos evaluar para diseñar una buena compaña.
Antes de lanzar una campaña de publicidad, primero debemos delimitar el público objetivo al que nos queremos dirigir. Aquí es recomendable segmentar los envíos de publicidad masiva para que ésta no pierda efectividad.
Además, debemos de conocer los diferentes medios de publicidad existentes y elegir siempre aquellos que nos ofrezcan mayor credibilidad. Esta elección, a su vez, dependerá del mensaje que queramos ofrecer, el público al que nos dirijamos, nuestros objetivos a alcanzar y el presupuesto que disponemos.
Existen muchos y diferentes tipos de publicidad impresa, desde publicidad en periódicos y revistas a través de anuncios, dípticos, trípticos, folletos, flyers, tarjetas de visita, cartelería, hasta llegar a la publicidad en gran formato como la que vemos en las vallas publicitarias, lonas impresas y vehículos rotulados. Según la reconocida empresa fabricabanderas.com, este tipo de publicidad tradicional impresa sigue reportando grandes beneficios, tanto en lo que a imagen de marca se refiere o imagen corporativa como en beneficios económicos reales. «Sobre todo» nos indica el directo de la misma «cuando se utilizan como patrocinio en grandes eventos».
Sin embargo, hoy en día está más en auge el uso de medios de publicidad digital para darse a conocer a través de páginas web, redes sociales, etc.
Otro punto a evaluar es la etapa de desarrollo en la que se encuentre tu empresa:
- Introducción.Estas iniciando y lo que tu negocio necesita es darse a conocer, y por lo tanto, las herramientas publicitarias serán básicas para arrancar y despegar.
- Crecimiento. En esta etapa puedes bajar tu inversión publicitaria para enfocarte más en la construcción de prospectos, fidelización, relaciones públicas, networking y satisfacción de cliente.
- Madurez. Aquí tendrás que evaluar tu situación competitiva y tu competencia. Si tu negocio está perdiendo su diferenciación, si es necesario que le comuniques nuevamente a tu mercado qué te hace diferente.
- Declinación.Todo producto tiene su propio ciclo de vida, y a todos les suele pasar que llega un momento en el que deben reinventarse para poder seguir adelante. Aquí el uso de la publicidad es clave y deberá estar enfocado a nuevos lanzamientos, promociones de liquidación o relanzamiento de marca.
¿Qué medios debo elegir para publicitarme?
Como hemos venido explicando en el artículo, primero debes manejar cierta información general antes de llegar a la elección de tus medios:
- Conocer bien el mercado, ya que este es el que marca la pauta del lugar donde debes anunciarte.
- Definir los objetivos que buscas con la publicidad.
- Buscar diferenciarte como tu estrategia principal.
- Tener muy claro el mensaje que deseas transmitir y la acción que esperas del mismo.
Entonces, los medios a usar dependerán de tu mercado, tu estrategia, objetivos y del propio giro de tu empresa. Además, debes considerar ciertos criterios al decidir cuál medio se ajusta mejor para alcanzar los objetivos que buscas con tu publicidad:
- Costo. ¿Cuánto cuesta el medio? ¿Puedo costear una campaña entera y no sólo una publicación? ¿Necesito invertir más en producción o material de apoyo?
- Accesibilidad. ¿Mi mercado meta tiene acceso a este medio?
- Facilidad de uso. ¿Este medio fácil de usar? ¿Necesito capacitación? ¿Puedo gestionarlo solo?
- Credibilidad. ¿Es creíble este medio para mí mercado?
- Participación. ¿Este medio estimula la participación de mi audiencia? ¿Puedo esperar respuestas de provecho?
- Difusión del mensaje. ¿Permite este medio extender la difusión del mensaje a largo plazo? ¿Requiere de mucha repetición? ¿Permanece su impacto?
- Relación con los objetivos.¿Se puede utilizar este medio para lograr mis objetivos? ¿Me dará lo que espero?
Estos criterios deberás colocarlos en el orden de importancia que amerita tu caso concreto. Habrá empresas en las que el dinero sea la situación más prioritaria, mientras que habrá otros donde lo más importante sea el impacto a largo plazo, etc.
Una vez que los tengas en orden, mide con cada criterio los medios publicitarios que tengas en mente: radio, cartel, prensa, TV, adwords, folletos, etc. y a partir de su evaluación, empieza a decidir qué medios te convienen más.
A diferentes negocios, diferentes publicidades
Ya tenemos claro que cada tipo de negocio puede requerir tipos de publicidades diversas, aunque hayan algunos productos que siempre son comunes para todas, como en el caso de las tarjetas de visita.
Por ejemplo, la publicidad para buzoneo es efectiva para negocios locales que ofrezcan servicios a las viviendas que se encuentran alrededor de dicho negocio, como en el caso de peluquerías, carnicerías, tiendas de ropa, autoescuelas, bares, restaurantes, tiendas de alimentación, academias locales, etc.. Sin embargo, este no será el medio más idóneo si lo que quieres es publicitar un servicio muy concreto que necesiten una publicidad más segmentada, como por ejemplo, alquiler de oficinas.
También tenemos la opción de la publicidad exterior, que si podemos recurrir a ella de una forma económica, es muy rentable. Esto porque toda aquella información que podamos dar a nuestros clientes potenciales y que tenga un alto número de visualizaciones nos hará llegar a una gran cantidad de público con muy pocos recursos. Por ejemplo, una pared en nuestro local que esté en una zona de mucho tránsito de público y a la que le podemos sacar el máximo provecho y llegar a mucha gente.
Otro ejemplo de publicidad exterior son las vallas publicitarias. Ahora, con la crisis, el precio de publicitarse en este tipo de soportes ha bajado considerablemente, y podemos encontrar muchas vallas publicitarias vacías anunciarnos. Incluso, existen algunos negocios que tienen la suerte de contar con un buen cartel para anunciar sus productos y hacer algo atrayente para el público.
Finalmente, Google nos permite cientos de acciones publicitarias, como por ejemplo contratar publicidad de pago por click (conocido como SEM, Search Engine Marketing, o Marketing en motores de búsqueda). Esto porque la mejor publicidad que puede tener nuestra empresa es que los usuarios la encuentren cuando están buscando nuestro producto o servicio, y eso es lo que nos ofrece precisamente esta herramienta publicitaria.
Eso sí, no está de más decir que para hacer algo atrayente, siempre es buena idea invertir una cantidad razonable en que una agencia de publicidad o de diseño gráfico, nos elabore una creatividad que llame la atención, y que haga vender nuestro producto, o darle valor a vuestra marca. Cualquier inversión que se haga en este campo será la mejor inversión que podrás hacer en pro de tu empresa.